La importancia de las interacciones
Nunca subestimes el valor de fortalecer tus lazos amistosos y construir relaciones cercanas con tu familia.
Las interacciones son esenciales para el desarrollo personal, el bienestar emocional y el éxito en la vida. A través de las interacciones con otros, aprendemos, crecemos y formamos relaciones significativas.
Ellas constituirán un invaluable apoyo emocional y te brindarán felicidad a lo largo de tu vida, además de otros varios beneficios para la salud, como menos resfriados y una disminución de la presión arterial.
Los investigadores también han descubierto que quienes tenemos vínculos cercanos con otras personas o buenos sistemas de apoyo personal sucumbimos con menos frecuencia al estrés y las enfermedades relacionadasvque las personas que se aíslan y no se sienten apoyadas. Lo que importa no es la cantidad de personas que haya en nuestras vidas, sino la calidad de las conexiones que tengamos con ellas.
Los estudios muestran, además, que el apoyo emocional que recibimos de amistades y seres queridos tiene un efecto positivo en nuestros sistemas cardiovascular, hormonal e inmunitario, además de reducir la presión arterial y los niveles de colesterol y, en última instancia, ayudarnos a vivir más tiempo.
Ahora bien, aunque todos necesitamos pasar ratos a solas de vez en cuando, es importante reconocer los beneficios de dedicar tiempo a nutrir nuestras relaciones. Te decimos por qué.
Dar y recibir
Una reacción común al experimentar mucho estrés es alejarse de otros, y generalmente esto sucede porque uno se siente incapaz de responder a los demás. Lo anterior puede llegar a convertirse en un círculo vicioso, es decir, cuanto más te desconectas más te aíslas. Pero, al hacerlo, también te privas de lo que otras personas podrían ofrecerte. De hecho, cuando pides apoyo haces que quienes te rodean se sientan valiosos y útiles, además de saber que pueden acudir a ti cuando tengan problemas.
Muchos damos por sentadas nuestras relaciones, especialmente aquellas con las personas más cercanas a nosotros. A menudo esperamos que prosperen como por arte de magia, sin reflexión alguna o sin poner un poco de creatividad de nuestra parte; no obstante, la realidad es que necesitan atención para evitar que se marchiten y mueran.
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Las investigaciones indican que muchos hombres al estar bajo presión se retraen, se vuelven poco comunicativos y se encierran en sí mismos, mientras que las mujeres en situaciones estresantes tienden más a extender sus horarios de trabajo y asumir cada vez más responsabilidades, canalizando su estrés en diversas actividades que llegan a agotarlas innecesariamente. Ambas respuestas son extremas y aumentan la gravedad del problema en lugar de resolverlo.
Aquí es donde las amistades y los familiares resultan de mucha ayuda, ya que es posible que puedan ofrecer una idea más clara de la situación, persuadirte para que tomes las cosas con más calma o ayudarte a hablar sobre lo que te preocupa. Cuando sientas que el mundo se te viene encima, trata de ver tus relaciones personales como un refugio al cual recurrir. No intentes arreglar las cosas por tu cuenta.
Inversión a futuro
Crear redes de apoyo con las personas que te rodean es una forma sensata de vivir la vida, además de ser una inversión sabia en tu futuro. Hoy en día, el mundo es un lugar incierto, y podemos perder repentinamente muchas cosas en las que basamos nuestro sentido de identidad y bienestar (nuestro empleo, hogar y estilo
de vida, por ejemplo), pero las relaciones sólidas generalmente se mantienen firmes y, en tiempos de crisis, pueden proporcionarnos la fuente más confiable de consuelo, bienestar y seguridad.
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Una buena relación aporta |
Una mala relación causa |
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