Cómo mantener el cáncer a raya - Guia de Bienestar

Cómo mantener el cáncer a raya

Día con día, se desarrollan tratamientos más eficaces para vencer esta enfermedad. Prevenir su aparición cada vez es más sencillo.

 ·  26/09/2023
Cómo mantener el cáncer a raya

El cáncer aparece cuando las células crecen, se reproducen sin control y destruyen órganos y tejidos sanos. No existe una cura única para esta enfermedad , pero hay muchas cosas que puedes hacer para mantener el cáncer a raya, con dieta y hábitos cotidianos podemos protegernos de este mal.

Aprovecha al máximo la aspirina Investigadores de la Universidad de Oxford, en el Reino Unido, creen que una dosis de 75 mg de aspirina al día puede ser muy eficaz en la lucha contra el cáncer (siempre consulta al médico antes de comenzar su ingesta, ya que puede causar sangrado interno).

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Estas son algunas de sus ventajas:

  • Limita la propagación: La aspirina evita que las plaquetas sanguíneas se adhieran entre ellas, lo que impide que las células cancerosas se propaguen por el cuerpo hacia los órganos. También se piensa que puede ayudar a reparar ADN dañado y hacer que las células defectuosas se autodestruyan antes de volverse cancerosas.
  • Protege los intestinos: La aspirina es especialmente eficaz para personas con el síndrome de Lynch, un trastorno hereditario también conocido como cáncer colorrectal hereditario no asociado a poliposis (CCHNP). Los investigadores hallaron que las personas que tomaban 75 mg de aspirina diariamente, padecie- ran o no del síndrome de Lynch, tenían 25% menos probabilidades de desarrollar cáncer colorrectal.
  • Combate tumores: Tomar una dosis diaria de aspirina puede ayudar a prevenir el crecimiento de tumores de mama, próstata y esófago. También puede brindar cierta protección contra la propagación de algunos tipos de cáncer de pulmón.
  • Disminuye el riesgo con legumbres: Los frijoles (porotos), chícharos (habichuelas) y lentejas contienen sustancias que, en pruebas de laboratorio, han demostrado combatir algunos cánceres. Las saponinas pueden prevenir la reproducción de células cancerosas y retrasar el crecimiento de tumores. Los inhibidores de proteasa pueden desacelerar la división de células cancerosas y evitar que las células tumorales destruyan órganos cercanos saludables. El ácido fítico puede retrasar el crecimiento de tumores. Además, las legum- bres también son ricas en fibra, que ayuda a reducir el riesgo de presentar cáncer colorrectal, de esófago, estómago, mama y próstata.

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Reduce tu consumo de alcohol

Los expertos opinan que el consumo excesivo de esta sustancia puede ocasionar cáncer; los más comunes son los de garganta, esófago, laringe, hígado, mama y colon. Nuestro cuerpo convierte el alcohol en acetaldehído, un compuesto que puede dañar el ADN e impedir que las células se autorreparen. Además, provoca que las células hepáticas se multipliquen más rápido de lo normal, lo que puede causar cáncer.

El consumo máximo de alcohol recomendado es de una bebida (240 ml de cerveza o 150 ml de vino o 45 ml de licores destilados). Mujeres y hombres por igual tienen que abstenerse de beber alcohol al menos dos días a la semana. Las mujeres deben ser más precavi- das con su consumo de esta sustancia, ya que tienen más grasa corporal, tejido donde el alcohol puede concentrarse. Además, este puede aumentar los niveles de estrógenos, hormonas vinculadas al cáncer de mama.

Germínate

Es bien sabido que el brócoli tiene propiedades anticancerígenas, pero el germinado de brócoli contiene aún más beneficios. Investigadores estadounidenses demostraron que, en comparación con brócoli madurado, un germinado de tres días contenía entre 20 y 50% más de sulforafano, una sustancia que ayuda a neutralizar las sustancias químicas cancerígenas antes de que causen daños. El germinado se puede cultivar fácilmente en un frasco o en un germinador especial, pero no olvides limpiarlo bien dos veces al día.

Date un gusto

El chocolate amargo, con moderación, es bueno, gracias a los flavonoides, antioxidantes que evitan que los radicales libres dañen las células, evitando así que se transformen en células cancerosas y se multipliquen rápidamente.

Apaga la parrilla

Considera cocinar a la parrilla con poca frecuencia para reducir el riesgo de cáncer. Estudios en Francia demostraron que una parrilla encendida por dos horas puede emitir altos niveles de dioxinas, sustancias que propician la formación de cáncer. Las altas temperaturas generan aminas heterocíclicas cancerígenas (AHC). Al cocinar sobre carbón, los hidrocarburos aromáticos policíclicos de las llamaradas pueden impregnarse en la carne, elevando así el riesgo de cáncer estomacal.

Para que tus parrilladas sean más saludables, usa carne baja en grasa, procura que las porciones sean más pequeñas para una cocción más rápida y precocina ligeramente el pollo u otros cortes con hueso que tarden mucho en cocerse.

Retira los alimentos procesados

Quienes consumen grandes cantidades de alimentos ahumados, encurtidos, curados, fritos y procesados tienen una mayor incidencia de tumores estomacales y esofágicos. Las carnes ahumadas contienen carcinógenos conocidos, mientras que los nitritos que se encuentran comúnmente en tocino, salchichas y carnes procesadas pueden generar carcinógenos llamados nitrosaminas.

La sal de los alimentos encurtidos puede lesionar la pared estomacal y acelerar la aparición de tumores.

Consume nueces de Brasil

Son la mejor fuente natural de selenio, mineral que combate el cáncer: una nuez contiene cerca de 75 mcg. En un estudio se vio que la tasa de mortalidad por cáncer se redujo a la mitad en quienes tomaron 200 mcg de selenio a diario por siete años. El mineral activa una enzima que mata las células cancerosas.


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