Experiencias en familia que te recargan de energía

En ocasiones es normal sentirse cansado y sin fuerzas. Dale la vuelta, y recarga tus las pilas y rebosa de energía, llama a tu familia.

 ·  29/03/2022
Experiencias en familia que te recargan de energía

¿Qué tan seguido has postergado pasarla con tu familia por falta de tiempo? ¿Alguna vez te has quejado de estar muy cansado como para estar juntos o acudir a un evento social, pero al hacer el esfuerzo descubriste que aumentó tu energía y sentimiento de felicidad?

He aquí algunas sugerencias para crear más “tiempo de relación” con tu pareja y tu familia:

Reserva un tiempo “para tu pareja”

Podría parecer innecesaria tanta formalidad, pero si anotas una fecha en tu agenda para que estén juntos, significará que no podrás contar con ese tiempo para nada más. Si surge otra cosa, tendrás una razón válida para decir: “Lo siento, pero ya tengo un compromiso para esa fecha”.

No canceles por ningún motivo, a menos que sea una verdadera emergencia.

Tómate el tiempo para platicar

Asegúrate de disponer de un “tiempo para platicar” con tus amigos y con tu familia. No sólo vayan al cine juntos o a bailar y a tomar una copa en lugares abarrotados y ruidosos, ni se arrellanen frente a la televisión por más disfrutables que puedan ser estas actividades.

Propicia la convivencia

Sé proactivo y organiza reuniones frecuentes frente a un plato de buena comida, y, si lo deseas, de un poco de vino. Uno de los mejores momentos para hablar es cuando se reúnen a comer juntos alrededor de la mesa, ya sea que cocines platos sencillos, ordenes comida para llevar o vayan a un restaurante.

Esto crea y fortalece los lazos de amistad y convivencia entre tus amigos y tú o entre tus amigos y tú, pero tiene que tomarse como una prioridad.

Es importante comer juntos

Insiste en que los miembros de tu familia coman juntos en la mesa, y no en su regazo frente a la tele. Quizá esto no sea posible todos los días o todas las noches, pero procura que suceda al menos un día o una noche, a la semana.

Incluye a tu familia

Trata de convencer a tu pareja o a tus hijos de que te acompañen a realizar algunas actividades o clases que te gusten, si tienes poco tiempo. ¿Sabías que los padres ya casi no juegan con sus hijos pequeños?


Sé consciente

Reconoce que la situación es temporal y que la presión no siempre será tan intensa durante esos periodos que te exigen mucho tiempo, como cuidar un bebé o un familiar mayor, y esto lo hará más fácil de aceptar. Y no trates de hacer todo lo que hacías antes de que cambiaran tus circunstancias.

No seas perfeccionista

Cuando estás muy ocupado, es mejor “bajar” tu nivel de exigencia y no recortar tus amistades. Si no te dio tiempo de sacudir, enciende unas velas y no se notará el polvo. No pierdas tiempo planchando la ropa interior, las sábanas o cualquier otra cosa que vaya a ver el resto del mundo.

Ahorra tiempo

Pide que te lleven los comestibles a casa. Muchos súpermercados ofrecen entrega a domicilio por una cuota muy razonable; y la verdad, un poco de dinero por la entrega es un gasto justificable si contribuye a tu calidad de vida y te deja tiempo libre para tus relaciones personales con tu familia o amigos.

Permite que otros te ayuden a darte más tiempo libre

Si tienes niños pequeños, pídele a alguien de la familia que los cuide para que puedas salir a reunirte unas horas con tus amigos. O pregúntales a tus vecinos si alguno de sus hijos quiere ganar un dinero extra al ayudarte a lavar tu auto, podar el césped, quitar la maleza o hacer otras tareas,

Hacer espacios para poder ver a tu familia

Investiga cuánto te costaría pagarle a una persona de limpieza por unas horas a la semana. Una vez más, el gasto extra valdrá la pena si te permites pasar más tiempo con tus seres queridos.

¡Sabías que los padres de familia ya casi no juegan con sus hijos pequeños?

Colaborar en conjunto con la familia

Haz una lista de las tareas domésticas en las que puedan ayudar tus hijos, sobre todo con la finalidad de que trabajen a tu lado: por ejemplo, pueden limpiar las ventanas o la comida, o la cena.

Los hijos más grandes, especialmente los adolescentes, necesitan el tiempo y la atención de sus padres, aunque es muy probable que no la admitan, y hacer quehaceres juntos puede permitirles platicar en un ambiente tranquilo donde incluso puede haber confidencias: por otra parte, los harás sentirse más útiles.

En realidad, al hacer tareas junto a cualquier miembro de la familia o un amigo es una excelente forma de propiciar un acercamiento de un modo natural.