Desconectarse para sentirse mejor
Cuando estás funcionando a tope, con demasiado estrés y mala alimentación, no necesitas encontrar tiempo... ¡necesitar perder noción de él! Aquí te decimos cómo puedes lograrlo.
La vida puede ser caótica y complicada. Y liberarse de la locura puede parecer una locura. Pero cuando estás funcionando a tope, con demasiado estrés y mala alimentación, no necesitas encontrar tiempo… ¡necesitar perder noción de él! Aquí te decimos cómo puedes lograrlo.
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Desconéctate
Apaga el teléfono celular, la computadora, el televisor, incluso la luces. Desconéctate del alboroto, el parloteo y la información que recibes cada día. No atiendas a la puerta, no respondas correos, no contestes el teléfono. Hazlo por un día, o hazlo por una hora si no tienes más tiempo.
Pon un pie delante del otro
Caminar es una de las mejores formas de ponerte en sincronía. Escoge un vecindario que no conozcas y simplemente deambula. Anda de arriba abajo por las avenidas principales y por cada pequeña calle. Sumérgete en las librerías y tiendas de segunda mano. Quédate a ver el partido de futbol de la preparatoria local. Disfruta de ser visitante en el mundo de alguien más.
¡Conduce!
Esta es fácil: sube al carro y arranca. Toma una ruta que normalmente no uses y ponte en marcha. No mires los mapas, no hagas planes, no enciendas el GPS. Solamente maneja hasta que tengas hambre o necesites estirar las piernas. Estaciónate cuando veas un lugar interesante. Sal, respira profundo y asimila tu entorno. Después regresa a tu carro y sigue conduciendo.
Desaparece
Esto requiere un poco de planeación si quieres conservar tu trabajo y tu casa. Dile a tu jefe, a tu compañero o a tu familia que te tomarás un tiempo para ti. Escoge un destino que sea diferente a los lugares que sueles visitar. Quédate en un lugar que no sea tu estilo usual. ¿Generalmente te gustan los grandes hoteles? Esta vez reserva en un pequeño hostal. Come en restaurantes familiares. Compra un libro para cuando llegues. Haz un pequeño voto de silencio. Viaja ligero. Regresa renovado.
Perdida-mente
Perderse no se trata de un destino sino de un estado de ánimo. Se trata de estar en algún lugar que evoque, que inspire y permita tener pensamientos libres o creativos que no se logran en la vida cotidiana. No hay que escalar el Machu Picchu. Tal vez baste con ir a un estadio o a un mercado oriental o a los estantes de una biblioteca o librería. Así que.. ¡sal de aquí!
