Deja de postergar tu salud, ¡tú puedes!

Te damos algunas tácticas para que dejes de postergar al mejorar tu salud. Efectúa cambios decisivos para estar sano y evitar enfermedades.

 ·  12/05/2021
Deja de postergar tu salud, ¡tú puedes!

Es fácil mentalizarse para hacer cambios importantes en la vida a fin de conservar la salud. Pero ¿perseverar en esos cambios y volverlos permanentes? Eso ya no es tan fácil.

Muchos postergamos por naturaleza, es decir, dejamos para después o retrasamos lo que se tiene que hacer en el momento; sucede también a la hora de implementar cambios para mejorar la salud, antes de que haya transcurrido mucho tiempo nos damos cuenta de que continuamos con nuestros hábitos dañinos.

Mantener tu motivación de comer bien, hacer ejercicio y efectuar otros cambios decisivos en tu estilo de vida es clave para estar sano y evitar enfermedades. Con la finalidad de ayudarte, te ofrecemos una diversidad de tácticas probadas para contrarrestar el acto de postergar cuando de mejorar tu salud se trata.

Dile adiós a la frustración

Sí: crear hábitos saludables implica trabajo. Y a eso se suman las dificultades y demandas de la vida diaria. Habrá momentos en que esto te frustre. Otros en que te frustre no ver ni un gramo de resultados, pese a tus esfuerzos por lograr tus metas. O que tus niveles de glucosa y colesterol suben, aunque hayas estado haciendo todo bien.

No hay secreto para perseverar, desarrolla tu capacidad de recuperarte y seguir lidiando con los reveses y retos de la vida. Muchos psicólogos creen que esta capacidad es un rasgo que todo el mundo puede cultivar, y que ayuda a las personas a seguir adelante.

Encuentra oportunidades de desarrollo

Si el médico dice que debes bajar un poco de peso, no pienses: “Tendré que dejar el pan”. Mejor piensa en formas divertidas de quemar más calorías, como andar en patines o jugar basquetbol.

Aceptar dificultades como bendiciones disfrazadas

Cuando notes los resultados, no te sonará tan absurdo. Muchas personas que aprovecharon el diagnóstico de enfermedades para revisar sus prioridades dicen estar más sanas ahora. Tienen mejores hábitos y una vida más feliz, disfrutan de mejor humor, tienen más energía y mejor control personal. Tú también puedes tener todo esto.


Dialoga contigo

Repite este mantra: “Yo puedo”. Los estudios muestran que quienes se sienten seguros de su capacidad de manejar las enfermedades y hábitos dañinos suelen seguir las pautas de dieta y ejercicio, y presentan mejores diagnósticos en sus análisis de salud.

Enlista tus fortalezas

Tener conciencia de tus fortalezas es como tener dinero en un banco de capacidad de recuperación. Cuando se presente el momento de un retiro, conocerás tu saldo disponible.

Enlista tus fortalezas, desde tu habilidad para interactuar con la gente hasta tu talento para guisar. Pide a quienes te conocen bien que aporten algo a la lista.

Anímate con cada actividad

Los estudios muestran que hasta 65% de quienes se inscriben en los gimnasios dejan de ir después de un periodo de tres a seis meses. ¿cuántas caminadoras y bicicletas estacionarias de todo el país hoy fungen como carísimos tendederos?

El ejercicio regular es decisivo para mantener un estilo de vida saludable. Si te está costando trabajo ser constante, puede ser que estés intentando demasiadas cosas, demasiado pronto y demasiado rápido. O bien podrías estar realizando un ejercicio que no se adapta a tus intereses, tu habilidad y tu personalidad.

O tal vez tu idea sobre hacer ejercicio sea muy agotadora desde que la piensas y es algo que debes cambiar.