1. Para preparar el tofu para el glaseado, cubre un colador con gasa o muselina y colócalo sobre un tazón, dejando suficiente espacio entre el colador y el fondo del tazón. Pon el tofu sobre la gasa y mételo al refrigerador para que drene y espese toda la noche.
2. Precalienta el horno a 175 °C. Cubre un molde para panqué de 19 x 9 cm con papel encerado o de estraza.
3. Muele las almendras en la licuadora o el procesador de alimentos hasta obtener un polvo grueso. Pásalo a un tazón grande junto con la nuez moscada, la canela, el azúcar morena, las zanahorias, el jengibre y las nueces. Revuelve perfectamente.
4. Agrega el aceite de oliva, los huevos y la vainilla; mezcla bien. Incorpora las harinas, el bicarbonato y el polvo de hornear; revuelve un poco.
5. Vierte la mezcla en el molde preparado y hornea durante 40 minutos, hasta que la parte superior ofrezca cierta resistencia al tocarla. Deja enfriar un poco y voltea el pastel sobre una rejilla para que se enfríe por completo.
6. Para preparar el glaseado, bate el tofu drenado con el azúcar glass, el aceite de oliva, la vainilla y la ralladura de limón, hasta obtener una pasta suave y cremosa.
7. Unta el glaseado en el pastel frío y esparce encima el jengibre y las nueces adicionales.
Cada porción (1 rebanada) aporta: 213 calorías, 4 g de proteínas, 16 g de grasa (2 g de grasa saturada), 15 g de carbohidratos (11 g de azúcares), 2 g de fibra, 91 mg de sodio.
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