Neuromodulación sacra, una alternativa contra la incontinencia urinaria

La incontinencia urinaria es una condición más común de lo que se cree. ¿Sabías  que una de cada cuatro mujeres mayores de 35 años y uno de cada cuatro hombres mayores de 40 años padecen esta enfermedad? En Estados Unidos se estima que 1 de cada 6 adultos tiene vejiga hiperactiva y uno de cada 12 adultos tiene incontinencia fecal crónica.

Es importante posicionar en la agenda pública puntos importantes como romper los tabúes y la vergüenza al momento de hablar de incontinencia para visibilizar y sensibilizar a todos frente a este problema.

Red de ayuda

Comunidades de pacientes como Retoma el control, brindan visibilidad, orientación y esperanza a quienes están viviendo con esta condición con herramientas, información y tips para identificar qué tipo de incontinencia se tiene, cómo buscar  ayuda  y cómo afrontarla.

Así los pacientes pueden conectarse con personas que están en su misma situación, compartir su historia, conocer sobre cómo tener una mejor calidad de vida y estar actualizados en cuanto a tratamientos.

¿Cuáles son los síntomas de la incontinencia urinaria?

Para entender más esta condición hay que identificar sus síntomas, explica el especialista en Urología Funcional, Reconstructiva, Urodinamia y Neuro-urología, Dr. Arturo García Mora.

• Escape de orina
• Aumento de la frecuencia al orinar o urgencia de llegar rápido al baño

Esas manifestaciones habla de la presencia de incontinencia, enfermedad con tratamiento médico especializado realizado por urólogos o coloproctólogos.

En Estados Unidos, según cifras ofrecidas por Retoma el Control, uno de cada seis adultos padece de incontinencia urinaria y ocho de cada 100 puede presentar incontinencia fecal.

Además, una de cada cuatro mujeres mayores de 35 años y uno de cada cuatro hombres mayores de 40 años padecen esta enfermedad, que se caracteriza por una pérdida de control de la vejiga e intestino.

Los tipos de incontinencia se dividen así:

• La incontinencia de esfuerzo o de estrés. Se relaciona con las actividades físicas, pues se produce una pérdida repentina de orina cuando hay un aumento de la presión sobre la vejiga por actividades como toser, estornudar o levantar algo.

Es causada por músculos debilitados o deteriorados del suelo pélvico. Existen diversos tratamientos, desde la rehabilitación y fortalecimiento de estos músculos hasta una intervención quirúrgica.

• La incontinencia de urgencia. Caracterizada por una necesidad urgente de ir al baño infinidad de veces hasta el punto en que no puede llegar a tiempo. Generalmente es causada por una vejiga hiperactiva (los músculos se contraen de forma involuntaria antes de que se llene la vejiga).

De esta misma forma, existen otros síntomas de vejiga hiperactiva como síntomas de urgencia frecuencia, en donde las personas que la padecen tienen la necesidad constante de dirigirse al baño.

Puede que estas personas no presenten pérdidas de orina, pero su calidad de vida está constantemente afectada por su necesidad excesiva de ir al baño, incluso por las noches.

• La incontinencia urinaria mixta.  Se da cuando se sufren varios tipos de incontinencia. Sus síntomas son pérdidas de orina al toser, estornudar y urgencia de ir al baño.
• La incontinencia dual se presenta cuando un paciente tiene incontinencia urinaria y fecal. Puede ser tratada por el urólogo o el coloproctólogo.

Neuromodulación sacra: tratamiento ampliamente probado

Una opción de tratamiento funcional es la terapia de control de la vejiga y/o intestino entregada por el sistema de Neuromodulación sacra. Esa terapia ha sido usada para tratar problemas de control de la vejiga por casi 20 años y más de 325,000 personas a nivel mundial han obtenido resultados favorables.

Se cree que el fallo de comunicación entre el cerebro y los nervios del sacro causa los problemas de control de la vejiga y los músculos involucrados en la micción.

“La terapia restaura la función normal de la vejiga estimulando suavemente los nervios sacros, instalando un pequeño electrodo cerca de la raíz sacra, explica el Dr.  García Mora.

Si el paciente responde adecuadamente a la terapia, el dispositivo se coloca bajo la piel mediante un procedimiento mínimamente invasivo, de muy bajo riesgo y reversible.

Infinidad de personas con incontinencia creen que deben vivir con ella sin poder hacer nada. Actualmente los tratamientos han mejorado y se puede vivir sin sentir sus consecuencias.

Es importante que las personas sepan que no es una condición normal asociada al envejecimiento y que tiene solución.